Como cada año, las personas a las que nos falta un ser querido, a las que nos sobra una silla o más de una, cuando llegan estas fechas, tenemos que soportar el anuncio de un turrón que nos hace mucho daño.
Llevo quejándome de ese anuncio, muchos años, pero no les llega mi queja. Tampoco les debe importar mucho, porque deben estar al tanto de mi queja y la de tantos que, si estas fechas son dolorosas porque no podrán reunirse con muchos de sus seres queridos, porque a quién no le falta alguno, tenemos que soportar ese estribillo machacón que nos anuncia que ya está cerca ese periodo de alegría para mucho y tristeza también para muchos.
Sí, señores de El ALMENDRO, ahora que además tienen una fundación con ese mismo nombre y que tan generosamente han deicidido traer a alguien que hiciera mucho tiempo que no vemos, a mi me hubiera gustado pedirles que me trajeran a mi hija. Me habría encantado mandarle una foto de ella, su nombre, sus datos, el tiempo que hace que no la veo (trece navidades) y me habría encantado ser la ganadora de uno de esos 10 billetes de avión para traérmela hasta mi casa. Pero resulta, que yo no he podido participar en ese sorteo porque mi hija está en un lugar donde no hay aeropuerto. Porque mi hija está muerta, porque la mató un conductor borracho, y está dos metro bajo tierra. Y ustedes se empeñan en que cada año vuelva a casa.
Ya es demasiado que nos tengamos que joder con su querido anuncio, en pos de los que son felices en Navidad, pero que además lo utilicen para crear una fundación sobre la familia, y los valores de la familia, ya es demasiado. O todavía no se han dado cuenta que en cada familia siempre falta alguien, siempre va a faltar algún miembro, que hay más familias rotas que familias que se reúnen felices por navidad.
https://fundacionvuelveacasa.org/
Señores de El Almendro, DELAVIUDA CONFECTIONARY GROUP, DLV ALIMENTACIÓN S.A.U., con C.I.F.: A-45428117, como madre, ahora una madre sin hijos, que no puede disfrutar de estas fiestas, les pido encarecidamente, por favor, que retiren ese anuncio que tanto daño nos hace a todos los que tenemos a alguien que no volverá esta navidad, ni ninguna otra. Se lo pido con toda la fuerza que me da el dolor. Por mí y por las cientos de madres que se encuentran en mi misma situación.
Flor Zapata Ruiz, madre de Helena, muerta por la acción de un conductor con alcohol.
P.D. En diciembre de 2013, fueron enviados tres ejemplares de una carta con la misma protesta se puede ver pinchando aquí. Ninguna respuesta.