Se cumplió el septimo aniversario de la muerte de Paolo, pero no me fue posible escribir para informar de los eventos previstos para ese día.
Hoy, con más suerte, quiero incluir un texto que su madre, Teresa, incluía en su mail:
No existen palabras… ni solidaridad, ni rabia, ni abrazos, ni lágrimas para afrontar algo como esto,… nada puede atenuar. ..Tanto dolor. …Todo es poco… las palabras sobran… nada tiene sentido… todo cae al vació… dolor que no puede ser comparado… a ningún dolor en el mundo… “Perder un hijo”. … El silencio puede expresar lo que se siente… Se necesita valor para enfrentar el dolor… se te va el alma… se nos va la vida… aunque injusta… la muerte es un hecho inevitable… comenzaran las preguntas sin respuestas…. Las culpas los culpables… los días sin sol… las noches interminables…. el aprender a vivir… sin “ellos…”… aceptar que ya no habrá… un mañana… ni caricias… ni un mamá… ya regreso… ni el beso al cerrar la puerta… ni las mil recomendaciones… tan solo recuerdos… de los momentos vividos… El orgullo y la alegría de haberlo llevado en el vientre… el acunarlo en brazos… el compartir su vida. … Si… Si… se puede mirar al cielo… decirle cuanto lo amamos… QUE POR SIEMPRE VIVIRÁ en nosotros. … A D´s. pedirle fuerza para poder seguir. … aunque el dolor… no permita ver el camino… y que nunca lleguemos a comprender el porque… ¡!! … La Vida… ¡!!
texto enviado por una amiga.
Un abrazo, Teresa, de los fuertes.
Flor Zapata Ruiz, madre de Helena.