Hoy aparecía en la sección de necrologías de El País, una esquela que decía así:
En memoria de nuestro querido hijo
DANIEL SORIANO ALONSO
Al cumplirse 3 años de su muerte y 28 años de su nacimiento
No sé por qué esta esquela me ha sonado a una muerte en la carretera. Tenía uno de los ingredientes básicos: joven. Y, por otro lado, la añoranza de unos padres que han perdido un hijo demasiado pronto.
He buscado entre mis noticias de fallecimientos por accidentes de tráfico, pero no he encontrado nada.
Después he buscado en Internet y he encontrado en la página de la delegación de alumnos de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Informáticos de Sevilla, fechada el 4 de Abril de 2006, la noticia de la muerte de Daniel Soriano Alonso, alumno de 2º, en accidente de coche el 30 de Marzo, y la convocatoria de una misa el 18 de Abril de 2006.
Se cumplía mi presagio.
Desconozco las circunstancias de esta pérdida. No importa. Pero sirva también mi pequeño recordatorio, en memoria de Daniel, y este poema de un padre que también perdió a su hijo en la carretera, y, casualmente, también se llamaba Daniel.
ESPERANZA
Cuánto llenan…mis ojos tristezas
tu recuerdo…en cenizas convierte
las alegrías pasadas. Sólo queda
la vida vivida. Rota esta rueda
que nos deja tu muerte.
¿Dónde buscar y encontrar fortaleza?
¡¡Cómo vivir y ser fuerte!!
¡¡Cómo aligerar tan pesada carga!!
Miras atrás y el desazón te embarga
de vivos recuerdos, que en el recuerdo hayas
cuál olas que mueren en mi doliente playa.
¡¡Cómo ser roca, que el golpe no hiera!!
Llora, llora mi alma en la miseria,
el olvidar no quiero, más yo quisiera
padecer alegría, sin parecer una feria.
A Dany, recuerdo vivo.
Hola. He encontrado esta página por casualidad.
Conocí a Dani, fue compañero mío cuando estudiábamos en Cádiz. Hoy me he acordado de él y de su accidente en la carretera, pero eso no importa.
Dani era un chico espectacular, humilde y muy trabajador. Siempre con una sonrisa y contagiando buen rollo a su alrededor.
Le encantaba la guitarra eléctrica y su ídolo era Joe Satriani. Yo no lo conocía y desde entonces cada vez que oigo a Satriani me viene Dani a la memoria.
Así que Dani sigue por aquí entre nosotros. Un abrazo