El dolor contenido

scan0048

Querida Hija: Ya han pasado nueve años, pero como dice mi amiga Flory , es igual que pasen nueve días, nueve años o nueve eternidades. Seguimos añorándote, extrañándote, echando en falta tus besos y abrazos, necesitando tu presencia constantemente.

Pero nadie se muere cuando quiere, ni siquiera aquellos que se quitan la vida, que siempre decía mi psicóloga, y nosotros no íbamos a ser menos. Seguimos envejeciendo, engordando, y con el dolor contenido, y eso es lo que hace que los demás piensen y te digan que estás muy bien, que te ven bien.

Y yo les digo, porque me veis de color. Porque, ya he comenzado a unir al negro y blanco, otros colores.

Pero tienen razón, estamos bien. La que peor está eres tú. Y cada vez que voy a verte me digo ¿Qué hace una chica como tú en un sitio como éste?

flores

Y me gustaría ser como otras madres que están convencidas de que sus hijos están en un lugar mejor, que son felices, y que volverán a verlos y a reunirse con ellos. Y las envidio por esa forma de pensar, pero no puedo, no he llegado a ese estadio.

Aún sigo sorprendiéndome por tu frase, y sigo pensando en lo que he tenido, pero también lloro por lo que he perdido.

Y siento que la vida fue cruel conmigo y contigo, con nosotros. Que el puto trabajo me quitó muchas horas de las que podría haber pasado contigo. Que la vida es engañosa y nos obliga a vivir desesperadamente, sin disfrutar de las cosas y las personas que nos rodean.

Echo tanto de menos tus besos, esos que si no se dan se pierden, y tus abrazos apretados, y tus piernas encima de mí pesando como tierra, y tu petición, casi  ruego, de acostarte conmigo cuando papá viajaba.

¡Cómo te habría gustado ver la terraza llena de calas! Tus calas. Este año sí que han dado flores. Cada año más. Es como si se empeñaran en, cada año, regalarte un nuevo ramo de novia, ese que decías que llevarías cuando te casaras.

Pero no quiero seguir contándote más cosas de las que me hacen llorar. Hay que ser contenido. Especialmente por los demás. Porque nadie quiere ver a alguien llorando durante nueve años. Porque nadie quiere sufrir por el dolor de los demás. Porque la vida sigue, que dicen todos. Pero es que nadie puede saber lo que otro siente, por mucho que intente imaginárselo o ponerse en su lugar, y a cada uno le duele lo que le duele.

Y de nada me sirve imaginarte en ese “país infinito” que me he inventado, rodeada de seres pequeños, convertidos en animalitos y llamándote “hada Helena”. Son solo pequeños trucos para ayudar a otras madres que han perdido a sus hijos.

Y no hay un solo momento del día o de la noche, un viento, un perfume, una conversación, la visión de una joven con el pelo recogido, una pareja de enamorados, una canción, una película, cada vez que tomo el tren, una carcajada, un poema, que no me traiga tu recuerdo, tu imagen, seguido de la tristeza de no tenerte.

Y cada día maldigo a quien te arrebató la vida y partió la tuya y la nuestra. Y sembró el dolor y la locura en esta casa, en esta familia.

No sé de dónde he sacado y saco la fuerza para sobrevivir nueve años. Quizás sea verdad que tienes magia, que eres un hada, que cada día soplas el aire que respiro, quizás, quizás.

Perdóname, mi vida,  esta locura. Sí, estoy loca, pero es de dolor.

Cada día me siento

 más huérfana,

cada día más sola,

cada día más perdida.

No tengo tu regazo,

para consolar mis penas.

Y el mío está seco,

solo y frio.

Hasta el día en que,

loca de tanto vivir,

pueda ir a reposar en otro,

a ella

que salió de mí.

“Tu regazo”. Flor Zapata Ruiz, madre de Helena.

(Perdona, Espido, los gerundios de este escrito. Son necesarios)

Flor Zapata Ruiz, madre de Helena, que murió por un conductor borracho.

Share this:
Share this page via Email Share this page via Stumble Upon Share this page via Digg this Share this page via Facebook Share this page via Twitter

Acerca de Flor Zapata

Desde Abril de 2005, soy Flor Zapata, madre de Helena. Ese es mi pie de firma desde que escribo para concienciar sobre los peligros de una conducción no responsable.
Esta entrada ha sido publicada en Aniversario, Correo sin entregar, Duelo, Historias, Muertes en carretera, Sentimientos y etiquetada como , , , , . Guarda el enlace permanente.

4 respuestas a El dolor contenido

  1. Virtu dijo:

    Querida Helena: verdad es que tu madre ha ido guardando ese dolor contenido pero también sé que gracias a ti, ha sabido transformar parte de ese dolor en dedicación a los demás… O quizás no sea el dolor, si no el amor tan grande que te tenía y ahora nos lo regala a los demás, y aún le sobra!… Porque es infinito el amor de una madre ( el de un padre también). Y cada vez que tu madre nos regala un pedacito de su tiempo, nos demuestra su cariño, me acuerdo de ti, preciosa Helena.

    Un besazo a mi hada favorita.
    Un abrazo familia.

  2. almudena dijo:

    Que podemos hacer los humanos tan débiles ( que aguantan tanto.dolor) ojalá mi abrazo de esta madre desconocida te pueda aportar algo departamento y serenidad. Quería decir tan.fuentes a la vez para aguantar tanto dolor

  3. Julia dijo:

    No tengo palabras Flor. No puedo ponerme en tu lugar, por más que quisiera, ese tan duro y amargo dolor es imposible sentirlo si no has perdido a alguien a quien amabas con tata fuerza y pasión como se ama a un hijo.
    Solo espero que allá donde se encuentre Helena, sí esté feliz. Y que cuando llegue ese día, puedas reunirte con ella. Mis creencias hacen que así lo sienta.
    Un abrazo mi querida prima. Te quiero.

  4. Carmen Manjon Plaza dijo:

    A si es
    Besos GORDOS

Responder a Julia Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *