Qué hacemos con la habitación de los hijos
No me refiero a esa habitación de la que todas las madres nos quejamos porque no hay quien entre, de lo que hay por medio. Me refiero a esa habitación que queda vacía, cuando perdemos a nuestros hijos, pero que está tan llena que no nos atrevemos a tocarla.
La habitación de Helena va para 3 años que sigue con sus cosas. Ahora, sus cosas y las mías.
Trato de utilizarla como mi despacho. La he llenado de carpetas con mis escritos, de escritos y noticias sobre las que quiero escribir, pero que no tengo tiempo, de escritos que han salido sobre mí y mi blog; pero sus cosas siguen ahí y casi me atrevería a decir, como dice Violeta, que también perdió asu hija, que sigue su perfume.
Detrás de la puerta, una nota que era el inicio de una relación que comenzó a hacer, sobre las cosas que se iba a llevar en su viaje de vuelta a Holanda: toalla playa, bikini/bañador, pendientes…
Comenzaba el buen tiempo en la Haya y pensaba poder ir a la playa.
Y ahí sigue la hoja con la lista y va para 3 años.
Mañana, nuevamente, está convocado el juicio contra el presunto culpable. ¿Qué pasará esta vez? ¿Quién no se presentará en esta ocasión? ¿Cuándo terminará esta pesadilla? La del juicio, me refiero, la de la falta de Helena, no tiene fin.
Sus ropas, sus peluches, sus fotos, las de su amor, las de sus amigos, familiares, todo sigue ahí, esperando, esperando…
Queridas madres, ¡Cuántas broncas porque no se puede entrar en la habitación! ¿Qué importa? Al menos, ellos están ahí, con sus cosas y también con su amor, aunque parezca que no.
La habitación de Helena está ahora peor, mucho peor y yo quisiera que estuviera ella para poderme decir «pero mamá que es mi habitación».
Y el presunto culpable nunca sabrá lo que es tener una habitación llena y a la vez vacia. ¡Qué dolor!
…Préstame tus fuerzas dame tu ternura
déjame decirte que la vida es dura
quiero que tu sepas que aquí estas conmigo
aunque el cruel destino haya pagado mal
háblame en silencio quítame estas dudas
acaricia mi alma vuélvete la luna
para contemplarte y decirte te extraño
para dedicarte todo lo que soy
porque son tus ojos con los que veo…
«Vuélvete la luna»
Jorge Avendaño. Cantante Shaila Durcal
Flor Zapata Ruiz, madre de Helena.
Publicado domingo, 13 de enero de 2008 17:41 por FZ_madredHelena