Querida Helena:
El otro día estuvimos en ese lugar al que te encantaba ir con tu merienda. ¡Está precioso! Nunca lo había visto tan bonito. Está preñado de flores y agua.
Pero esta vez no tuvimos que preparar tu merienda. Ni el agua por si te daba sed. Tampoco buscar una piedra para que te sentaras a comer.
Pero hicimos fotos. Muchas fotos. Para que pudieras verlo.
¿Te gustan? ¿Verdad que está bonito?
Pero hoy estamos tristes…
Tu mamy.
Publicado viernes, 23 de abril de 2010 21:44 por FZ madredHelena.