Madres que luchan
A veces, cuando siento que personas que no han tenido la pérdida de un hijo piensan que los que sí hemos pasado por ese trance, “estamos tocados” y cuando yo misma pienso que con mis escritos o actuaciones, puede parecer que estoy loca, miro a mi alrededor y veo otras madres, otras madres que luchan por la injusticia y por parar las guerras que empiezan otros.
Aquí va un ejemplo, es un pequeño resumen extraído de la página www.josecouso.info:
Intervención de Maribel Permuy López (Madre de José Couso) en el acto público en el Círculo de Bellas Artes
16.12.2005
“Estoy compartiendo esta mesa con dos madres que también han perdido a sus hijos Pilar Manjón, en los trenes de la muerte, Cindy Sheehan en Iraq y un padre: Juan Torres que perdió a su hijo en Afganistan, pero yo también querría representar en estos momentos a los millones de madres que no tienen voz para denunciar la muerte, desapariciones y asesinatos de sus hijos.
Resulta paradójico que habiendo sido mi hijo asesinado por soldados del ejército estadounidense, yo esté compartiendo esta mesa con familiares de soldados pero me da igual donde estuviera nuestro hijo, da igual quien fuera. Sabemos que una guerra criminal nos lo ha arrebatado de nuestras vidas, que nuestros hijos son las víctimas inocentes por las mentiras de los políticos sin escrúpulos, y en el caso del hijo de Pilar por terroristas iluminados y fanáticos.
Compartimos el dolor por su muerte y somos madres y padres en lucha.
Mucha gente no entiende esta lucha, no entienden que yo, no me quede en mi casa llorando… por supuesto que lloro por mi hijo, lo lloro de día y de noche, pero lo lloro de pie.
Mi hijo es un símbolo para el periodismo independiente. Ha puesto su cara, y, su nombre.
Al igual que otras que han perdido a sus hijos, las madres no estamos preparadas para verlos morir. Nadie nos ha preparado para esto. Podemos entender el ver como mueren nuestros padres, pero cuando esta ley se invierte se produce un shock que es difícil de superar.
Cuando yo me desmorono y pienso que toco fondo, creo que no debo parar que debo seguir denunciando, que mi voz sea una pesadilla, junto con la de mi familia para seguir exiguiendo justicia.
Viendo a estas madres que están aquí conmigo, pienso que es igual, da igual la manera, el lugar. Porque nuestro dolor es el mismo, y lo más grande es poder traer un hijo al mundo. Lo vi desangrarse en la televisión, vi como sus compañeros lo llevaban en un colchón, mientras pedía que le taparan la cara, para que sus hijos no lo viesen. Creo que con esto ya he dicho todo. Porque a mi hijo no lo ha matado el alcohol, ni el tráfico, lo han asesinado porque querían ocultar la matanza de civiles, las guerras injustas, la violación de los derechos humanos.
Lucho y denuncio las guerras preventivas…”
Poesía de Javier Couso Permuy leída por él mismo en el acto público
Vivan las madres en pie
las madres sin miedo.
Vivan las flores mas dignas
abonadas con duelo.
Ramos de luz, regados con sangre
selvas serenas, plagadas de ausencias.
¡Viva mi madre!
Madre sin miedo
viva su porte de bella entereza.
¡Viva mi madre!
Ejemplo de vida,
viva su esencia cargada de fuerza.
No hay ciclón más grande
ni fuerza más viva
que el amor que engendra
del vientre la vida.
No puede la muerte
con las madres en pie
No pueden los viles
enterrar su fe.